Capitulo 4 - Cambios

(Suena el teléfono)
- ¿Diga?
- Hola Niki. – Era Marta. - Estoy llegando, prepárate que dentro de 5 minutos estoy en tu casa.
- Vale. Oye ¿tienes un cigarro?
- Claro que sí, bueno que ahora llego, te dejo porque con lo torpe que soy, soy capaz de caerme hablando contigo.
- Jajaja, hasta ahora.
Cuelgo y me pongo mis botas, cojo mi bolso y busco el mechero dentro de él. Mmm no esta en el bolso, me parece que lo dejé en la chaqueta. Si, está ahí. Miro la hora (está a punto de llegar Marta) Así que cojo mi chaqueta a toda velocidad y me coloco el bolso. Tengo que decirle a mi madre que voy a salir, que sino luego se enfada.
- ¿Mamá?
- Estoy en el comedor. – Me dice.
Estaba viendo la tele estirada en el sofá, igual que como si se hubiera caído de un quinto piso.
- Mamá, voy a salir con Marta un rato para mirar tiendas, ya sabes. A las 9 estaré en casa.
- Has acabado los deberes. – Me dice en tono serio (o al menos lo intenta)
- Si mamá, solo teníamos una redacción de inglés. – Suena el timbre. – Bueno te dejo. – Le doy un beso veloz. - ¡Hasta luego!
- Nicole… No tardes mucho en llegar que tenemos que hablar.
Me pareció raro lo que dijo, pero me giré y salí por la puerta. Bajé por las escaleras y me encontré con Marta en el portal, acabándose un cigarro.
- ¡Hola fea! – Me dijo con esa sonrisa y esa energía tan suya.
- Hola. ¿Me dejas matarlo? – Sé que me notó rara.
- Claro. ¿Ocurre algo? – Me da lo poco que queda de cigarro
Lo sabía, me conoce demasiado. Doy la última calada y lo tiro.
- Nada. – Suelto el humo. – Tengo el presentimiento que algo está a punto de cambiar.
- Claro, a lo mejor ya va siendo hora de que te busques un buen hombre, que casi tienes 18 años mujer.
Se rió y me empujó, yo fingí estar enfadada, y al final me reí. Ella me abrazó y yo la intente morder y al final las dos acabemos en el suelo, riendo como dos niñas pequeñas. Ya sabes, lo que hacen las mejores amigas.
- No me interesa el amor, ya lo sabes. – Dije finalmente, y las dos pusimos rumbo hacia nuestra tarde de compras.
Esa tarde Marta se compró un jersey muy mono de ZARA, y algo de base de maquillaje en ‘Sephora’. Se podría haber comprado más cosas, pero le compro a Oscar, su novio, una sudadera ADIDAS que consiguió arruinarla económicamente por esa tarde. Yo compré un gorro, unos pantalones y una camisa, todo de ‘Pull&Bear’. Al final acabemos en una cafetería muy famosa de nuestra ciudad, nos tomamos lo de siempre (Dos capuccinos con nata) y nos sentemos en la terraza de fuera. Marta me contó algo sobre una sorpresa que le hizo Oscar para celebrar los 2 años y pico que llevan juntos mientras nos fumábamos un cigarrillo. Me pareció bonito lo que le hizo, pero la verdad es que no me entusiasmó mucho, no me gustan las sorpresas. Ya era hora de volver a casa, me despedí de Mata, encendí el ipod y me fui caminando hacia casa.
Cuando llegué a casa me llamó mi madre.
- Hola mamá, mira lo que me he comprado…
Entré en el comedor y estaban todos esperándome: Carlos, Didi y mamá.
- Ven Niki, siéntate, os tengo que contar una cosa. – Dijo ella.
Me senté al lado de Didi, enfrente de mamá y Carlos. La verdad es que me pareció raro todo aquello y encima tenía un mal presentimiento…
- Cuenta.- Dije esperando oír una buena noticia.
- Nos mudamos de ciudad.
-¿QUEEEEEEEEEEE? – Dijimos al mismo tiempo Didi y yo.
Era una noticia que para nada esperaba oír...

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