Seguidores

viernes, 29 de julio de 2011

Menos es nada.



Y ahora sólo me queda darte las gracias. Gracias por ser un imbécil integral, por haberme ahorrado muchas lágrimas (aunque alguna vez sí que haya llorado por ti), gracias por demostrarme que no vales la pena, que sin ti me va mejor, que no te necesito (aunque a veces crea que sí) y señorito, que aunque tenga días de todos y a veces te trate mejor: no esperes nada de mí, nunca más. Porque si me he vuelto borde y paso de ti es porque ahora sé diferenciar entre persona y gilipollas. Y lo siento, siento que te joda que te trate así sin motivo aparente, pero mira... es que ahora me quiero un poquito más y no podía seguir sufriendo por alguien que me trataba así.

Gracias por hacerme más fuerte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario